domingo, 18 de julio de 2010

Ricardo Güiraldes



Ricardo Güiraldes

Ricardo Güiraldes nació en Buenos Aires en 1886 y muere en Francia en 1927. Sus restos fueron trasladados ese mismo año a la Argentina donde fueron recibidos por el Presidente de la República, Marcelo T. de Alvear. Una comitiva de escritores y paisanos  del pago, acompaña por última vez a Ricado Güiraldes en el trayecto final hacia el cementerio de San Antonio de Areco. En las cercanías de la tumba de Güiraldes será enterrado, años después, Don Segundo Ramírez, el personaje que inspiró la figura central de Don Segundo Sombra. (3)
Su obra está compenetrada del espíritu de la Provincia de Buenos Aires(1)  y en especial de San Antonio de Areco. (2)
Fue novelista, cuentista y poeta. Su obra más notable es Don Segundo Sombra (1926), un clásico seguro de las letras argentinas. Al respecto, dice Ivonne Bordelois, biógrafa de Ricardo Güiraldes: “…Puede argüirse con razón, que en su movimiento mismo la obra de Güiraldes representa, en definitiva, una dirección pasatista, un afincamiento en el pasado antes que un arrojo hacia adelante. Lo que importa, con todo, es señalar que la nostalgia de Güiraldes no encubre resentimiento, sino grandeza de ánimo; no es reivindicación de valores prescriptos, sino propuesta de aquello que ha de salvarse de la usura de los días y sus mudanzas en el patrimonio de los hombres.

El estoicismo de Don Segundo Sombra no es un lujo desdeñable que sirva de coartada o salvoconducto a explotadores o explotados: es, ante todo, la respuesta cierta al desafío cierto de una naturaleza hecha de distancia  demoledora. Es una templanza nuestra y necesaria; es la sobriedad de nuestro coraje, la medida de nuestra fuerza, el encauzamiento de la violencia ancestral que nos acecha. Güiraldes no alcanza estas verdades sino a través de un duro debate consigo mismo, de un denodado nadar contra la corriente de sus propias y engañosas venturas…”. (3)

Sobre Don Segundo Sombra escribió Leopoldo Lugones en La Nación: “Paisaje y hombre ilumínanse en él a grandes pinceladas de esperanza y fuerza. Qué generosidad de tierra la que engendra esa vid, qué seguridad de triunfo en la gran marcha hacia la felicidad y la belleza. Y qué éxito tan justo el del artista que ha sabido evocarlo”. (3)

La novela Don Segundo Sombra termina con la frase: “Me fui, como quien se desangra”.

¡Qué frase única en la literatura argentina!

“En 1926, Ricardo Güiraldes había recorrido con sus viajes las grandes ciudades del mundo y en todas partes había encontrado un cuadro similar: el de la era industrial. Güiraldes con su obra proponía al lector recuperar su identidad perdida y logró que el folklorismo trascendiera sus límites locales. Creó un lenguaje universal y el gaucho y la pampa se sumaron al bagaje literario de todos los pueblos. Su obra culminó con Don Segundo Sombra (1926) cuya historia se basa en el Kim de R. Kipling, con metáforas procedentes del vanguardismo francés de principios de siglo. En esta obra el cosmopolismo literario y el arraigo al país se funden en una de las producciones más características de la moderna literatura latinoamericana..”. (1)


Ricardo Güiraldes pasó en Europa su primera infancia aprendiendo a hablar francés, alemán, y por último castellano. En 1890 Manuel Güiraldes, Dolores Goñi (sus padres) y sus tres hijos regresan a  la Argentina donde Ricardo Güiraldes pasará sus años en La Porteña, la estancia de Manuel Güiraldes – bautizada con el nombre de la primera locomotora argentina.
En 1897 llegó Rubén Darío como cónsul de Colombia en Buenos Aires. En 1893 Ivonne Bordelois destaca como año del apogeo del modernismo contra el cual reaccionarían, años después los grupos literarios animados por Güiraldes. Darío publicó en Buenos Aires Los raros y Prosas profanas (1896).

En 1915 se publica El cencerro de cristal y Cuentos de muerte y de sangre impresos en los talleres de José Tragant. Las audacias del cencerro escandalizan al público, que olvida el segundo libro de Güiraldes, donde ya se anuncia el estilo de Don Segundo.

“… Propósito de los cuentos: “Quisiera que mi prosa fuera extractada, breve, fuerte: lo que más me gusta en la mano es su capacidad de convertirse en puño”. Un “coherente y múltiple fracaso” saluda la aparición de ambos libros. Güiraldes, desalentado, los arroja a un pozo de La Porteña. Adelina consigue rescatar algunos ejemplares. …”.(3)

Ricardo Güiraldes introdujo el tango en París (4) junto con Alberto López Buchardo en 1912. (3).
- Le enseñó el tango a la Princesa Murat”. Pasa una temporada viajando por Italia, Grecia, Constantinopla, Egipto, la India, China, Japón, Rusia, Alemania. De vuelta en París se instala temporariamente en el taller de Alberto Lagos. Regresa después a Buenos Aires y lee a Jules Laforgue, que influirá en su libro El cencerro de cristal.
El 20 de octubre de 1913 se casa en la Iglesia Nuestra Señora del Socorro con Adelina del Carril.

En 1923 publicó su novela Xamaica, que había terminado en París en noviembre de 1919. En el mismo libro se anuncia Don Segundo Sombra y los Poemas solitarios.

Ese mismo año, Olivero Girondo promueve el “frente único”: todos los escritores y artistas unidos por un mismo deseo de renovación deben olvidar sus desavenencias particulares para luchar contra el enemigo común: el “pompierismo”. Preparación de Martín Fierro: en febrero de 1924 aparece Martín Fierro (segunda época) tribuna del “frente único”. donde Güiraldes colabora desde mayo. Allí Güiraldes conoce a Borges y se pone en contacto con los jóvenes escritores argentinos.

En 1925 Güiraldes colabora en Proa, Martín Fierro y en Valoraciones (La Plata).

Roberto Arlt fue su secretario. Citado en la biografía de Güiraldes de Ivonne Bordelois:
“En el rostro alargado, moreno, bajo la frente “retobada como en encontronazos de espacio” que evocaba Roberto Arlt, lo primero son los ojos”.  Lo que respiro de pampa fluye en tranquilo empaque de mis ojos, diría el mismo Güiraldes en su Libro bravo.

“La adversidad de Güiraldes- sea dicho esto sin afán de paradoja – parece haber consistido en el cúmulo de facilidades que lo asediaron desde su infancia. Hijo de casa antigua y acaudalada, nada le fue negado de aquello que concierne a la esperanza y a la envidia del común de los mortales. Las fotografías han sido fieles a su innegable hermosura varonil…”. (3).

(c) Araceli Otamendi - Archivos del Sur

Bibliografía:

      Ricardo Güiraldes, Don Segundo Sombra, Editorial Losada, S.A. Buenos Aires     (decimonovena edición), 1939

(1)    Pilía, Guillermo, Diccionario de Escritores bonaerenses (coloniales y siglo XIX). La Plata, Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, 2010

(2)   ciudad de la Provincia de Buenos Aires.

(3)   Ivonne Bordelois, Genio y figura de Ricardo Güiraldes, Editorial Eudeba, 1998

      (4) Entrevista inédita de Araceli Otamendi  a Ivonne Bordelois para una investigación sobre el tango (2004).

2 comentarios:

Julián Barsky dijo...

Muy bueno el blog. Me gusta mucho el espacio a escritores de la provincia, a veces pareciera que todo pasa por Capital nada más. Felicitaciones.

Araceli Otamendi dijo...

¡gracias por el comentario! Julián,

un abrazo