viernes, 10 de mayo de 2013

La carta de Gardel - novela (fragmento)




Se ha adueñado del espacio y escribe. Es el espacio de él que ahora es de ella, sólo de ella. Llega hasta ahí, el hombre de seguridad sabe que ella puede subir e instalarse en la oficina a cualquier hora del día o de la noche. ¿O no es una secretaria, acaso? Todo lo que ella pueda hacer por él, ordenar sus cosas, vigilar el orden de sus cosas, agendar los datos ya está hecho. Ahora es el momento de ponerse a escribir. ¿Por qué lo haría? ¿Por qué Mary, una secretaria, volvería a la noche a la oficina? ¿O no tenía nada mejor que hacer? ¿Por qué elegir a Mary para contar una historia que ya no existe? ¿Acaso la carta podría estar oculta en alguna parte, tal vez ahí? ¿Hasta dónde seguir a Mary? Duda. La lluvia irrumpe, las gotas se deslizan por los vidrios de la ventana, caen en alguna parte, y los ojos de Mary ven la noche desde el piso veinte, tal vez más alto, ¿qué importa? Una secretaria, alguien como ella puede entrar en el espacio privado de Guillermo y escribir su historia. Guillermo deja pistas de su vida por donde sea, tal vez a propósito, pensaba. Escribir en una libreta lo que piensa, lo que sueña, lo que no tiene ganas de decir. Y eso hace.



Adela está despierta, el tarambana de su único hijo varón no ha vuelto, se ha ido a Rosario con los amigos.  Si él estuviera ahora ahí le pegaría, le gritaría de todo, le diría estúpido, ¿por qué fuiste ahí? a jugarte a los dados y a las cartas lo que no tenés,burro. ¿Y para eso tuve hijos? Sólo Dios sabe y a él me encomiendo, para que él esté de vuelta pronto, quiero verlo, ahora mismo. Sin embargo, Adela prepara el cinturón, cuando él llegue va a pegarle una buena paliza, le gritará  infeliz, ignorante, de todo.  Porque ahora ella es la madre y el padre también, porque el padre está muerto y ella ahora es todo en esa casa desprotegida, en esa casa donde  ella Adela, asume todo el control, la protección y el amor y él, él, no puede haber hecho esto. Tiene ganas de escuchar la radio mientras teje, música de Gardel, un tango, una milonga, quiere olvidarse el trago amargo, la noche más triste,...De eso se hablará después. O no, o tal vez... Adela no sabe que su hijo se ha escapado del hotel sin pagar. Rosario, la "Chicago argentina" lo atrae con sus juegos, con sus peligros, la noche en Rosario puede ser más divertida que en Buenos Aires, cuando se tienen diecisiete años, la vida por delante...Gardel va a estrenar un tango, un nuevo tango, será muy famoso, y ella Adela, quiere cantar canciones mexicanas para alegrarse,  canciones de Jorge Negrete, ¡ay! "Si Adelita se fuera con otro, la seguiría por tierra y por mar..." Adela tararea la canción ....

(c) Araceli Otamendi - Todos los derechos reservados 

No hay comentarios: